La Plaza de Toros de Valencia reúne la celebración de Horitzó País Valencià

El 22 de abril, la Plaza de Toros de Valencia acogió el acto Horitzó País Valencià. La reivindicación social fue el hilo conductor de una noche en la que la música protagonizó la velada. Nueve actuaciones, entre las que estuvo presente la emoción del Cor Dona Veu, conformaron más de cinco horas de canciones y diálogos.

Desde Benimaclet, Maluks y su música urbana fueron las encargadas de dar comienzo a los conciertos con Me Toca. Vibrando con los ritmos de Nonai Sound, las cantantes Laura y Marina realizaron un breve recorrido por su primer disco, representando la festiva Comboi y la reivindicativa Contra l’oblit. En apenas un mes, verá la luz el que será su segundo álbum de estudio ‘Cor i Foc’ (2023), es por ello que esta cita significó el fin de gira (por todo lo alto) de ‘Som i Vibrem’ (2021).

 

La segunda actuación de la velada dio paso a la tradición que arroja El Diluvi. El folk es su identidad personal y los de l’Alcoià llevan demostrándolo casi una década. Tras los últimos lanzamientos, la banda dejó entrever un nuevo camino sin perder su esencia, el cual se vivió en directo de la mano de Terra que no oblida y A fer la mà. En un acto así, tampoco podían faltar las icónicas I Tu, Sols Tu y Alegria, que fueron las encargadas de poner en pie a un público que esperaba con ganas los grandes éxitos de la banda.

La energía que desprende JazzWoman cada vez que pisa un escenario, junto a su banda, consigue contagiar a los asistentes de cada concierto con sus ritmos urbanos, y esta vez no iba a ser menos. ‘Atlantis’ (2022), su último álbum de estudio, fue el protagonista de la intervención con la interpretación de La Selva y Anem a tot. Pero sin duda, los temas que no podían faltar en un día tan señalado, fueron Amor i amistat y parte de Cançons D’ofrena, que recibieron con entusiasmo los presentes en la plaza. 

Marala y la fusión del folk-electrónico, presente en ‘Jota de morir’ (2022), otorgaron a la industria musical uno de los proyectos más innovadores del panorama valenciano. El disco, que refleja el pasado desde los sonidos más actuales, es una combinación que en directo destacó en canciones como Canteu a l’albat o Disimula. La unión de los sintetizadores, con la percusión y la puesta en escena, consiguieron que, junto a las voces de Selma, Sandra y Clara, el espectáculo fuera impecable.

La sencillez de Esther, acompañada exclusivamente por las melodías de las guitarras, fueron la consecuencia de aportar uno de los momentos más íntimos del evento. La cantautora generó un aura de dulzura con las letras de Xiqueta del sol y Dimecres, las cuales forman parte de ‘Les cartes que mai vaig cremar’ (2022), su primer álbum de larga duración. El instante más entrañable del concierto se vivió con Tinc una casa menuda, cuando apareció Sandra Monfort para interpretar junto a la artista la primera colaboración de la noche.

Como una bocanada de aire fresco, Colomet se hace hueco cada vez en más escenarios del territorio. Tras el lanzamiento este mismo año, de su primer álbum ‘22’ (2023), la artista se enfrentó a uno de los escenarios más imponentes que ha pisado hasta el momento. Un breve recorrido por su discografía, en la que combina el reggaeton con la sensibilidad, nos llevó desde Com la Dua Lipa, pasando por Massa Benimaclet hasta la emotiva DxVida.

La llegada de La Fúmiga, con un setlist prácticamente al completo, puso en marcha los pogos en la pista. Once personas en el escenario, que no han perdido fuerzas a pesar de haber recorrido de norte a sur cada fiesta a la que se les invita, daban comienzo al concierto con Ja No Fa Mal. La banda realizó un recorrido desde ‘Espremedors’ (2019) hasta ‘Fotosíntesi’ (2021) con las ganas y el dinamismo de las primeras veces, haciendo también partícipes de su celebración a Esther, con la cual interpretaron Hora Blava para el fin de fiesta.

Los de Alzira son, a día de hoy, la definición de dedicación a un proyecto que han cuidado al máximo desde el inicio, cuando sacaron a la luz temas como Cançó Que Mai S’acaba. Una canción que homenajea a aquellos grupos que han abierto paso para que las bandas que formaban parte del cartel esa noche, pudiesen alcanzar ese hueco. Una de esas bandas es La Gossa Sorda y los componentes Josep Nadal, Àlex Seguí, Joan Marc y Pere, volvían a subirse de nuevo al escenario para rememorar tres de sus temas con La Fúmiga como banda.

Sin lugar a dudas, fue el momento con más expectación de la cita. La raíz de la música en valenciano volvía a estar presente y lo hizo desde el inicio de La Polseguera, momento en el que los asistentes y seguidores del grupo no olvidarán. Tres canciones que para muchos era un sueño desde que La Gossa Sorda se despidió con L’Última Volta en 2016. Acompañados de la característica dolçaina, El Pecat Original se hacía hueco entre los temas interpretados, que pondrían fin por todo lo alto con Camals Mullats y gente coreando ‘Que torne La Gossa’.

Horitzó País Valencià ha unificado la frescura de nuevos proyectos con la tradición de nuestras raíces, en un día en el que han estado más presentes que nunca. Con un cartel en el que primaban las mujeres, la organización ha sabido captar la esencia para crear un evento que muchos tardaremos en olvidar.